La crisis de la COVID-19 causada por el coronavirus ha resaltado el trabajo esencial que proveen los miembros de la Unión Internacional de Trabajadores de la industria de Alimentos y del Comercio (UFCW, por sus siglas en inglés) en las comunidades a lo largo y a lo ancho del país. Los miembros de nuestra unión están arriesgando su salud y su seguridad para garantizar que el suministro alimenticio de nuestra nación esté resguardado, que los estantes de las tiendas de comestibles estén llenos, y que las personas accedan a los medicamentos y a los servicios de salud que necesiten. Los hombres y mujeres del UFCW que trabajan arduamente merecen mejores salarios, beneficios y estándares de seguridad para protegerlos ya que sirven a la comunidad.
Necesitamos políticas que le den prioridad a las personas trabajadoras y a sus familias. Estas cuestiones afectan la vida diaria y el sustento de los miembros de la UFCW:
Pago por actividades peligrosas para los trabajadores esenciales
Los hombres y las mujeres que trabajan arduamente en las tiendas de comestibles, farmacias, plantas de procesamiento de alimentos, centros de atención médica, etc. han estado brindando a nuestras comunidades los servicios esenciales durante la pandemia. Durante este tiempo de crisis, han puesto en peligro su salud y la de sus familias para ayudarnos a poner alimentos en nuestras mesas. Merecen aumentos salariales que reflejen los riesgos a los que se enfrentan y la importancia de su servicio a la comunidad.
Empresas multimillonarias como Kroger, Amazon y Walmart han puesto fin a sus aumentos salariales temporales para los trabajadores, mientras que siguen obteniendo ventas y ganancias récord. El riesgo de infección grave y a veces mortal de la COVID-19 que enfrentan estos trabajadores no ha terminado. Por el contrario, el riesgo al que se enfrentan los trabajadores esenciales ha aumentado ya que los brotes de la COVID-19 continúan en todo el país.
Dejar el asunto en manos de las compañías no dio resultado. Muchas de las personas que trabajan arduamente para servir a nuestras comunidades fueron olvidadas. Les corresponde y merecen mucho más.
Días por enfermedad y licencia remunerados para todos los trabajadores
La propagación de la COVID-19 ha resaltado las consecuencias económicas y sanitarias que enfrentan los trabajadores cuando carecen de acceso a los días por enfermedad remunerados y a las licencias familiares y médicas remuneradas. Millones de trabajadores deben decidir de forma devastadora entre arriesgar su propia salud o arriesgar la pérdida de su cheque de sueldo o de su trabajo.
Todas las personas trabajadoras que están enfermas, afectadas por órdenes de cuarentena, o que son responsables de cuidar a los niños cuyas escuelas han sido cerradas, deberían tener la protección laboral y la licencia remunerada. Hacer posible que los trabajadores permanezcan en casa y cuiden a nuestras familias sin sanciones es tan importante como proteger a los trabajadores en el trabajo.
De aquí en adelante, debemos elevar los estándares de los trabajos en Estados Unidos, para que todas las personas trabajadoras reciban un sueldo justo por su esfuerzo y sus lugares de trabajo reflejen las necesidades de las familias actuales, lo que incluye la capacidad de cuidar a los niños y miembros de la familia.
Normas de salud y seguridad para proteger a los trabajadores esenciales
La Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA, por sus siglas en inglés) debe emitir una norma temporal de emergencia (ETS, por sus siglas en inglés) para proteger a todos los trabajadores con riesgo potencial de exposición ocupacional a la COVID-19.
Las normas de salud y seguridad de la OSHA para la COVID-19 deben garantizar que los trabajadores esenciales tengan una exposición viral limitada y que los trabajadores infectados que no presenten síntomas tengan una exposición limitada a los compañeros de trabajo y a los clientes. Se debe exigir a los empleadores que evalúen los riesgos específicos del lugar de trabajo, apliquen controles para reducir los riesgos, desarrollen protocolos y capacitación, y elaboren planes para la pandemia, con la participación de los trabajadores en cada proceso.
La ETS debe abarcar a los trabajadores de las tiendas minoristas, los establecimientos de venta de comestibles, de cuidado de la salud, los sectores de carneo de vacas y de aves de corral, y su procesamiento y otras industrias esenciales. Las regulaciones de la OSHA para los trabajadores del sector minorista deben incluir disposiciones de distanciamiento social, y un límite en el número de clientes que pueden estar presentes en un lugar de trabajo; capacitación, protocolos y controles apropiados para el uso de equipos de protección personal; y tener un protocolo para tratar con clientes y trabajadores que muestren síntomas de COVID-19.
Pruebas y presunción de enfermedad en el lugar de trabajo
Los trabajadores de tiendas de comestibles, farmacias y procesamiento de alimentos están en las primeras líneas de la epidemia de la COVID-19. Se ha requerido a los trabajadores de toda la cadena alimentaria que trabajen para asegurar que nuestros hogares tengan alimentos, suministros y medicamentos recetados adecuados. Al hacerlo, muchos trabajadores ya han muerto a causa de la COVID-19 y muchos más se expondrán al virus a medida que se siga propagando. Debemos garantizar que los trabajadores del sector de alimentos sean elegibles para todos los beneficios que otros trabajadores esenciales de primera línea deben estar recibiendo, como el cuidado gratuito de niños mientras trabajan, pruebas y tratamiento prioritarios, y equipos de protección personal.
Se debe considerar a la COVID-19 como una enfermedad del lugar de trabajo para los trabajadores esenciales. Una presunción de enfermedad en el lugar de trabajo permitiría a los trabajadores esenciales que hayan contraído el virus a través del cumplimiento de sus obligaciones realizar una reclamación de indemnización por accidente laboral sin enfrentar un proceso potencialmente prolongado que amenace su salud y seguridad financiera.
Jubilación segura
Todas las personas que trabajan arduamente merecen un ingreso estable y confiable una vez que dejan de ejercer. Necesitamos un sistema sólido de jubilación, beneficios extendidos de Seguridad Social y sueldos justos para que las familias trabajadoras puedan acumular ahorros jubilatorios a lo largo de sus trayectorias laborales.
La transición entre las jubilaciones de beneficio definidas tradicionales hacia los ahorros individuales ha dejado a muchos trabajadores con ahorros jubilatorios nulos o insuficientes. La crisis económica causada por la pandemia actual no ha hecho más que aumentar la importancia de estabilizar el sistema de pensiones de múltiples empleadores y de proteger a los trabajadores de la quiebra. Los estadounidenses que pierdan sus trabajos cuando las empresas se declaren en quiebra deberían recibir el pago y los beneficios prometidos y que les corresponden como parte de su compensación. No deberían nunca mantenerse al margen de la paga del CEO o de las acciones en Wall Street.
A todas las personas trabajadoras les corresponde y merecen una jubilación segura.
Velocidades en las líneas de producción y seguridad en las plantas de empaquetado de carnes
Los hombres y las mujeres de las plantas de procesamiento de alimentos de Estados Unidos están trabajando incansablemente durante esta pandemia para mantener los alimentos en nuestras tiendas y en nuestras mesas a pesar del enorme riesgo para su salud y la salud de sus familias. Los brotes de COVID-19 en las plantas de empaquetado de carnes han provocado cierres temporales de las plantas e interrupciones en la cadena de suministro de alimentos. Proteger a estos trabajadores es esencial para mantener seguros al suministro de alimentos y a nuestras comunidades.
La UFCW ha pedido regulaciones obligatorias y exigibles para proteger a los trabajadores contra el contagio y la propagación de la COVID-19, lo que incluye:
- Desacelerar la velocidad de la línea y establecer distanciamiento físico en las empresas de procesamiento y carneo. El distanciamiento social y físico de 2 m (seis pies) debe practicarse y aplicarse en la mayor medida posible, sin eliminar ningún empleo, incluso si significa disminuir la producción.
- Proporcionar equipamiento gratuito de protección personal para los trabajadores dedicados al carneo y el procesamiento de carne de vaca y aves de corral. El acceso al equipamiento de protección personal, como barbijos y guantes, es fundamental para disminuir la exposición de los trabajadores.
Ampliar el SNAP
El Programa de Asistencia de Nutrición Suplementaria (SNAP, por sus siglas en inglés) sirve como la primera línea de defensa contra el hambre. El programa es fundamental para mantener a los trabajadores de la cadena de suministro de alimentos en sus trabajos y en condiciones de mantener a sus familias durante esta pandemia. Se debe ampliar el acceso al SNAP con salvaguardias que apoyen a los empleados de las tiendas de comestibles, y a garantizar que las tiendas autorizadas sigan sirviendo a los clientes del SNAP sin interrupciones.
Específicamente, la UFCW apoya el aumento de los beneficios máximos del SNAP en un 15 por ciento; lo que aumenta el beneficio mínimo del SNAP de $16 a $30; y la suspensión de todas las reglas administrativas del SNAP que terminarían o reducirían los beneficios.
Creemos que nadie que trabaje arduamente debe pasar hambre o tener que elegir entre comer o pagar sus cuentas. SNAP proporciona un respaldo fundamental para las familias trabajadoras en comunidades que trabajan arduamente.